07/SEP/04

 

IV Informe: Cuando el intestino descarga en el cerebro.

 

El pasado 1 de septiembre los mexicanos pudimos observar lo que sin duda ha sido el espectáculo más patético de nuestros legisladores en muchísimos años –y miren que han hecho bastantes en el tiempo de existencia de ese poder-, cuando en el IV informe del presidente Vicente Fox la bancada perredísta –principalmente- mostró el cobre y confirmó que una gran parte de nuestros supuestos representantes no merecen estar en esa posición por el simple hecho de no tener las mínimas normas de educación, urbanidad y respeto.  Vamos al hecho.

 

De entrada, el Palacio Legislativo estaba cercado ante el cúmulo de manifestantes presentes que intentaban boicotear el acto, muchos de ellos atascados de bebidas alcohólicas, haciendo bailes callejeros, arrojando bombas molotov, piedras y tubos a la policía, quienes tuvieron que aguantar a pie firme y cuidarse de no agredir a los rijosos, so pena de ser amonestados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos –Delincuenciales faltó en el nombre-.  Los partidos pasaron a tribuna a manifestar sus posiciones previa llegada de Fox: Convergencia aceptando avances y haciendo críticas, el Partido del Trabajo, mostrando una visión simplista, solucionó los problemas del país en sus minutos de exposición, lo cual fue bastante ridículo; el Partido Verde mandó a un chamaco que ni siquiera sabía leer con propiedad y se dedicó a defender al heredero del dueño del partido, Jorge Emilio González, para dar paso al Partido de la Revolución Democrática, quien en la voz de Jesús Ortega hizo una crítica muy dura, pero puntual y respetuosa; el Partido Acción Nacional trató de conciliar y mostrar avances, además de tirar algunas pedradas a la oposición y por último el Partido Revolucionario Institucional, que fiel a su tradición, habló y habló sin decir nada medianamente claro.  Hasta aquí, todo bien.

 

Cuando llegó el presidente, ya habían salido a recibirlos un grupo de legisladores perredístas con mantas, como si estuvieran en algún plantón, todo para tratar de parar el proceso de desafuero del peje de gobierno, Andrés Manuel López Obrador.  Pues bien, apenas empezó el Presidente de México a leer y nos encontramos con una continua interpelación de principio a fin; esto ya es de por si lamentable, pero los nenes no se concretaron solamente a gritarle a Fox “mentiroso” o “Pinocho”, nada de eso.  Sacaron mantas, cartulinas, fotos de AMLO, gritaron consignas –“No al desafuero”-, varios maleducados platicaban de píe dando la espalda a la tribuna, como si ahí se ubicara cualquier hijo de vecino, y en el colmo de la falta de respeto a su envestidura, al Presidente y al recinto que los alberga, un grupo de imbéciles, de enanos mentales, de patanes, de nacos, lamebotas idiotas con nulo criterio y cerebro de mierda de ratón –porque ni siquiera tienen en eso calidad humana- hicieron una marcha.  ¡Una marcha en los pasillos del Palacio Legislativo!  ¡Un grupo de legisladores comportándose como si estuvieran en un mitin político partidista con correligionarios!  ¡N´ombre!  Era irritante que, sin importar lo que Vicente Fox explicara, el tema era agredido.  No vimos un informe, vimos una interpelación que duró el mismo tiempo que duró el informe. Pero faltaba el pináculo de la peladéz:  Cuando Vicente Fox pide una tregua y ofrece diálogo, la bancada perredísta, con contadas excepciones, dio la espalda al presidente.  Esa fue la cereza de un pastel que se me indigestó, al igual que a la mayor parte de la población, ante el júbilo y orgullo del retrógrado, frustrado, cerrado y antitodo Pablo Gómez, que como Coordinador de su bancada debió haber metido orden, pero qué esperanzas, su mentecita nada más no le carbura.

 

¿Sabrán estos pelafustanes que al darle la espalda a la tribuna, le dieron la espalda, no a Vicente Fox, sino al Presidente de la República –el poder ejecutivo-, al Presidente del Senado y al de la Cámara de Diputados –el poder legislativo- y al Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación –el poder judicial-, además de dar la espalda al nuestra bandera, el lábaro patrio?  ¡Claro que no!  Su capacidad de análisis no les alcanza para eso, ellos solo pueden ver el bulto en bruto, pero son incapaces de ver los detalles, aunque sin quererlo dejaron el claro su actitud con el país: desconocieron a los tres poderes de la unión y a la insignia patria.  Tienen los ojos cerrados y la cabeza hueca, lo único que pueden pensar es en la forma de evitar el desafuero de su nuevo Mesías, ese que los puede llevar al gobierno del país, aquel que no se defiende por la vía legal porque no es lo suyo, sino por la vía del desorden, la movlización y la selectividad en la impartición de justicia: AMLO.  Y que México ruede, lo único importante es salvar al peje, aunque para ello tengan que agredir a quien sea y paralizar todo mecanismo de diálogo.  Y no importó que el Presidente de la Mesa los conminara al orden de mil maneras, diciendoles que los estaban viendo miles de personas, que no era la forma, que estaban mostrando mala educación, que faltaban al respeto a ellos mismos, nada les cayó en esa cabecita hueca.  Y digo yo, ¿Qué esperaban lograr?  Los legisladores saben perfectamente que el formato del informe no permite interpelaciones, que el presidente por formato no puede contestarles, así que lo único que pretendieron fue reventar a Fox.  Una bruta que estuvo destacando por sus insultos se atrevió a decir que esto era parte de la democracia y que así se desenvolvían en el parlamento inglés; dudo que la tipa sepa en donde está Inglaterra, pero si a esas vamos, deberían de agarrarse a balazos porque así ha sucedido en los congresos asiáticos.  Hay personas como esta que deberían nacer mudas.

 

No se a usted, pero a mi todo esto me indignó, sobre todo porque estas lacras que gritaban están en comisiones como la de Cultura, la de Orden y Respeto y las de Relaciones, o sea, como si fuera una mala broma, quienes supuestamente elaboran el reglamento interno de la Cámara eran quienes lo violaban, quienes asesoran en asuntos de educación y urbanidad se comportaron como gentuza.  Aun hoy, se dicen orgullosos y acusan a los medios de la animadversión que reciben.  Pero eso y más merecemos por llevar a esas posiciones a personajes sacados de los estratos mas bajos, corrientes, patanes e ignorantes de nuestra sociedad.  ¿Quienes estaban ahí?  Líderes sindicales, barzonistas, invasores de terrenos, defraudadores, panchos villa, bejaranistas y la cínica –porque parece que tuviera cara para pedir justicia en forma alguna – Dolores Padierna -esposa de René Bejarano, mano derecha del peje, movilizador profesional y delincuente filmado en flagrancia recibiendo dinero sucio- y digo yo, a esta basca no se le puede pedir cultura.

 

Y no se trata de decir que Vicente Fox interpeló a Carlos Salinas cuando era legislador, porque eso también estuvo malNo se puede justificar una mala acción con otra, no se puede decir que tiene que aceparse un mal comportamiento porque antes la otra parte la realizó a la inversa, aunque los seguidores de este partido acostumbran hacer estas afirmaciones para hablar de “justicia”.  Eso no es hacer un acto de justicia, sino rebajarse al nivel del agresor.  Desgraciadamente, los legisladores del PRD en su mayoría –con las destacables excepciones de personajes muy críticos pero muy inteligentes y con mucha clase como Jesús Ortega, Demetrio Sodi y Amalia García-, demostraron lo que son: nuevos ricos que al no haber tenido nada antes, hoy mareados con un poco de poder están a punto de enloquecer.  Pero llévenlos a la presidencia y la vida no alcanzará para arrepentirnos.  Esta fue una muestra.  Allá de nosotros si permitimos que unos orangutanes retrasados controlen nuestros destinos.

 

Comunicación: fj@lavisiondelciudadano.com

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