¿Para que queremos Presidente?

 Nuestro Poder Legislativo, a sabiendas de las necesidades del país, enfocó sus baterías en conseguir una meta y lo ha logrado.  Ha comenzado a generar cambios en el país.  Ante una agenda de temas pendientes, valoró y sopesó la importancia de los temas pendientes y le dio prioridad a un punto vital para el desarrollo del país, algo que nos va a echar para adelante.  ¿La reforma eléctrica?  ¿PEMEX?  ¿La deuda de agua con Estados Unidos?  ¿La revisión de alguna propuesta de ley?  No, señores.  ¡Ya tenemos un nuevo formato para el informe presidencial! – junto con otras propuestas de igual importancia.

 Pues sí.  Los grupos parlamentarios se han puesto de acuerdo para modificar el informe presidencial - el cual podría llevarse a cabo en enero de cada año, además de obligar al Presidente a escuchar los posicionamientos de cada partido y a participar en una ronda de preguntas y respuestas - pero no solo eso también van a limitar las facultades del Presidente para que no pueda, por ejemplo, hacer recortes al gasto social en una situación extrema de las finanzas públicas (¡!), además proponer que el Legislativo sea quien apruebe la conducción de la política exterior.

 Lo que entiendo de nuestra democracia es que la mayoría de la gente votó por un proyecto, un proyecto que se llevaría a cabo y que en este caso no ha podido operar debido a la contra permanente del Legislativo.  Rosario Robles – que también abrió su boquita – diría que también se votó por un equilibrio de fuerzas para “controlar” al Presidente.  Lo que desgraciadamente se ha visto en este año y medio de gobierno y de nueva legislatura es que nuestros diputados y senadores están hambrientos de poder luego de haber carecido de capacidad de decisión por tanto tiempo; su función principal y constitucional – como se ha mencionado muchas veces en esta columna y que al parecer desconoce la Sra. Robles y sus compañeros – es hacer leyes o modificaciones a las mismas en beneficio del país, lo que hasta el momento ha quedado claro que no les interesa, lo importante para ellos es buscar el error en el gobierno para descalificarlo y lograr adeptos para sus partidos – no hay que olvidar que el próximo año es muy importante desde el punto de vista electoral -.  Según sus afirmaciones, si no hay dinero en las arcas del gobierno, se debe seguir gastando lo mismo en gasto social aun en situación extrema.  Pregunta:  Si no hay dinero por ser una situación extrema ¿De donde diablos van a sacar dinero para no afectar a este ramo?  ¿Qué apartado hay que descuidar entonces?   Eso por un lado, ahora pasemos a otro comentario sobre el mismo tema.

 Rosario Robles, presidenta adjunta – porque a mi nadie me quita la idea de que el titular es Cuauhtemoc – del PRD habló en Aguascalientes de una serie de propuestas de modificaciones a la Constitución Mexicana, destacando que el Congreso pueda ratificar a Secretarios de Estado, aprobar modificaciones presupuestales y la ya mencionada política exterior e invalidar el veto presidencial.  Ya quisiera ver lo que propondría esta mujer si su líder moral, ídolo y casi santo fuese el Presidente, estaría proponiendo una total independencia del Ejecutivo, pero como no es así, hay que bloquear todo lo que venga del Primer Mandatario.  Con base en lo anterior me pregunto – otra vez como hace tiempo - ¿Para que queremos presidente?  ¿De que sirve que gane un candidato que trae cierta propuesta que no va a poder aplicar y cuya única función va a ser de parapeto, porque las decisiones las va a tomar el Legislativo?  Mejor les propongo algo:  Con el poder que la Constitución les otorga, anulen la figura presidencial y conviertan al Legislativo en la cabeza del país, sin rendir cuentas a nadie, pagándose sus lujos, viajes y demás necesidades, decidiendo a su gusto los destinos de México, manejando todo como sus caprichos les dicten, total, cuando el país quede en ruinas habrán “trabajado” lo suficiente para tener un capitalito que les permita emigrar a otra zona del mundo – fregados los que no podamos ser económicamente fuertes.  ¿Saben porque no se atreven a llegar a tanto – aunque mucho lo deseen -  Porque en este momento en caso de problemas producto de sus decisiones, el culpable absoluto sería el Presidente, acuérdense del mazacote fiscal que el Legislativo creó y ahora, ante la falta de eficiencia de este remedo de reforma para capturar impuestos, exige al ejecutivo soluciones.  ¡Pobre país!  Como no hay asuntos más importantes y prioritarios, el Legislativo busca  la forma de tener mas poder.  ¡Que lástima!

 OTROS…

 1) ¿Esos tipos que marcharon hoy por la ciudad de México son maestros?  ¿Esos son los educadores que preparan a nuestros estudiantes para que sean mejores mexicanos?  ¿Esos que marcharon hasta la Secretaría de Gobernación en donde realizaron pintas – cual chavos banda de antaño – y patearon las puertas?  ¿Esos tipejos que se presentaron a la cercanías de Los Pinos lanzando insultos y haciendo señas obscenas a las cámaras de los diferentes medios de comunicación?  ¿Esos que no parecen tocar el agua y el jabón ni por equivocación?  ¿Esos que exigen aumento salarial sin respaldarlo con trabajo y sí con constantes paros de labores?  ¡Mejor derribamos las escuelas!  Se las pongo fácil en una apuesta de doble o nada:  Apliquemos a un grupo de estos personajes un examen de conocimientos básicos según el nivel de educación que - supuestamente – imparten estas personas, si lo aprueban – aunque sea con 6, para que vean que no soy exigente – tendrán su aumento, si no lo aprueban, no solo pierden su aumento, sino que renuncian públicamente a su plaza por incapaces.  ¿Alguno de estos remedos de maestros se atrevería a aceptar este reto?  Dan pena y provoca preocupación saber que tienen a muchos de nuestros jóvenes a su cargo.

 2) ¿Qué hace falta que suceda para que alguien les ponga un alto a los marchístas de Atenco – que se presentaron “como apoyo” para los maestros – que siempre portan y agitan en la vía pública sus machetes?  Repito, una persona común – porque estos señores ya son “estrellas” en los medios – no podría caminar cien metros blandiendo un machete en la calle sin ser detenidos, así que estos tíos –entre los que siempre hay menores de edad – ¿De que privilegios gozan?

 3) Al señor López Obrador le prometí un ejercicio de esos que le gustan, ahora que anda en contra de toda crítica acerca de la inseguridad en la capital del país.  Simple.  Salga de su oficina – y con el medio de comunicación de su preferencia para dejar constancia – y haga estas tres preguntas a los transeúntes que usted prefiera – para que no diga que son parte de una campaña en su contra -:  ¿Se siente seguro en la ciudad de México?  ¿Conoce a alguna persona cercana, amigo, vecino, familiar o usted mismo que hayan sido víctimas de un delito en la última semana?  Según su apreciación  ¿La inseguridad en la ciudad ha crecido o permanece igual respecto al año pasado?  Espero que este listo para aceptar los resultados.  Suerte.

 Como de costumbre, este es tan solo mi punto de vista.