La banda más caliente del mundo
Aproximadamente cinco semanas antes nos enteramos que el espectáculo que queríamos ver vendría al D.F. “por fin”, ahora había que esperar la venta de boletos por Ticket master, ¿cuanto irían a costar?. Así que nos dispusimos a esperar pacientemente y quince días antes del acontecimiento empezó la tan ansiada venta, al verdad si que no eran muy baratos, los que nos hubieran encantado de hasta abajo eran bastante caritos y la verdad la economía no da para tanto así que consideramos otras opciones que nos satisficieran y compramos los que eran segundos en costo, pero elegimos un lugar bastante privilegiado ¡digo!, junto con otros cuantos idem sentados en la misma fila que nosotros, frente al escenario y cerca de una enorme tarima en la que veríamos a uno de los principales integrantes casi a 3 ó 4 metros de distancia. Salió caro y ahora faltaba ver si el gasto había valido la pena “aquí entre nosotros, yo no estaba muy segura”, la vez anterior fue bastante bueno y me gusto mucho, así que iba a ser difícil que rompieran mis expectativas, por lo menos las mías.
Por fin llegó la fecha esperada con tanta ansiedad, nos fuimos más temprano de lo usual, había que comer en un lugar cercano y luego llegar al recinto una o dos horas antes para poder comprar souvenirs con toda calma, tranquilidad y sin aglomeraciones ¡aja!, sí como no. Al acercarnos al lugar nos dimos cuenta que todas las entradas a los estacionamientos ya tenían largas filas, nos pusimos muy abusados y logramos llegar sin tropiezos al nuestro o al que estaba más cercano a la puerta que nos daría acceso a nuestros lugares.
A partir de ese momento, todo fue verdaderamente impactante. El lugar donde vendían los recuerdos estaba repleto y puedo decirles que casi el 99% de la gente llevaba el uniforme de los conciertos de este grupo, todos de negro y playeras con una cantidad de imágenes del grupo muy impresionantes, además de gente pintada como los integrantes, familias y grupos de amigos caracterizados, etc.
Verdaderamente parecía una mañana en el Chopo, ¿alguna vez han ido? incluso logré reconocer a varios personajes clásicos de este lugar, hicimos algunas compras de pánico “por si se acababan a la salida” ¿? y cargando triques nos fuimos a buscar nuestros lugares. Sin duda fue buena la elección, nos sentamos entre un chavito como de 16 años, lo cual no es raro, pero si el hecho de que iba totalmente solo, lo cual a mi compañero lo hizo recordar su primer concierto del grupo en México hace diez años, al cual asistió del mismo modo pues nadie lo pudo acompañar, pero lo disfrutó tanto o más que el chico ahí sentado; de mi lado estaba una parejita, lo cual no es raro tampoco, pero si toman en cuenta que la chica parecía modelo de Channel, con su falda rosa y saquito haciendo juego, unos mules con tacón perinola que eran una belleza, pero totalmente inapropiados para el lugar y haciendo juego con los mules una bolsa tipo cajita que era un primor, pensé que estaba totalmente fuera de lugar y que se iba a aburrir soberanamente; su novio bastante “normal”, detrás nuestro un padre joven como de 28 años y su hijo de no más de 7, muy modernos los dos.
Poco a poco el lugar se fue llenando hasta el tope e iniciaron los asistentes a hacer la tradicional ola a la cual nos unimos, para no ser menos digo yo.
Por fin llegó el momento y el grupo abridor o invitado “MODERATO” se presentó, dejándonos un agradabilísimo sabor de boca con sus refritos de música nacional pero en ritmo de heavy metal; me pareció bastante bueno y les aplaudimos mucho. La verdad me gustaron mucho, buena voz del cantante y buenos músicos. Iniciaba bien el asunto, “ojalá y así siga”, pensé para mis adentros.
De repente se apaga totalmente la luz y se escucha por los altavoces: “ALRIGHT MEXICO…….YOU WANTED THE BEST AND YOU´LL GOT THE BEST, THE HOTTEST BAND IN THE WORLD……, KISSSSSSSSSS”, todo lo dicho coreado por la audiencia y que se escuchó verdaderamente impresionante, como todo lo que siguió. Una parafernalia de juegos artificiales, luces en movimiento, lanza llamas y la música que empezó a sonar entre el griterío general ¿y que creen que pasó para mi enorme asombro? Bueno, de ahí me fui de sorpresa en sorpresa.
Justo cuando todo esto pasaba y nos poníamos todos de pié al mismo tiempo, la chica Channel pegó un brinco y prácticamente se estampó en la malla que nos separaba de los lugares hipercaros y se puso a gritar como loca, Kiss, Kiss, Kiss! wowwwwwwwww!!!!! Gene, I love youuuuuuuu!!!!! Paul, I love youuuuuuuuu!!!! Y yo con el ojos cuadrado totalmente asombrada de la reacción, y de ahí pal real no paro de gritar, de brincar, de cantar y de desgañitarse durante todo el concierto.
Terminó la primer canción y cuando iban a iniciar la otra melodía, en los dos primeros acordes escuchamos tras nosotros una vocecita infantil que empezó a tararear, tarararan, tarararan, tararan, tan tan imitando perfectamente a la batería de la melodía “Deuce” y de ahí se siguió cantando en su inglés todas las canciones, verdaderamente se las sabía bien y a lo mejor no entendía mucho, pero el inglés era muy bueno para sus escasos 7 años, además que imitaba los movimientos del guitarrista como si fuera un roquero; su clímax fue cuando Gene empezó a escupir su mezcla de yogurt con tintura roja y el mocete en cuestión empezó a gritar ¡sangre!, ¡sangre!, ¡sangre!, el papá estaba vuelto loco también con el hijo y con el grupo. Así que estuvimos disfrutando todas y cada una de las melodías que Kiss interpretó, pues la gente coreaba todas y cada una de las canciones y bailaban disfrutando la entrega del grupo y el impresionante despliegue de performance. Mis momentos memorables fueron cuando Paul Stanley fue transportado prácticamente volando, sostenido por un cable con una argolla y llegó hasta la tarima que antes les mencioné, así que lo tuvimos muy cerca, espero poder mostrarles las fotos.
Otro buen momento fue cuando la impresionante batería de Eric Singer se eleva a una altura considerable, y cuando Gene Simmons abre sus impresionantes alas y sujeto de arneses parece volar con todo y bajo hasta encima del sistema de luces; una escena muy surrealista que a todos los gustó.
El nuevo requintísta, Thommy Thayer estuvo a la altura de las circunstancias y la verdad que no extrañé para nada a Peter Criss ni a Ace Frealey, así que después de más de de dos horas de locura, culminaron con la clásica “Rock and roll all night” y el confetí empezó a inundar el recinto, más que papel parecía cascada por la gran cantidad de papel que caía del techo y de los cuatro puntos cardinales del recinto. Ya para estas alturas habían salido dos veces al encore y nos siguieron deleitando con más. Lamentablemente todo llega a su fin y esas dos horas y un poquito más se fueron también volando, todo se apagó y nos dispusimos a retirarnos con un excelente sabor de boca, la gente salio ordenada, tranquila y comentando el show por demás entusiasmados. No hubo un solo incidente malo, los papás iban con sus hijos pequeños, con esposa, suegra y hasta abuelitas, total familias enteras, como les decía anteriormente, pero todas con conocimiento total del grupo, nada de asisitir por moda o por blof.
Olvidaba contarles que había personas que estaban perfectamente disfrazadas e incluso había cuartetos de amigos representando de forma por demás realista al grupo, lo cual era muy impresionante, porque uno hubiera pensado que se estaba topando con el grupo a no ser por la frescura de la pintura la cual en los originales ya estaba dañada por el sudor.
A muchos de ustedes les debe extrañar que algo tan surrealista me guste, pero si, la verdad es que los admiro mucho como músicos y como personas ¿porqué? Pues simplemente por que independientemente de su imagen escénica que me fascina, son personas sanas que no hacen escándalos de sus vidas, no están envueltos en drogas ni en problemas legales, de hecho los dos integrantes originales ausentes –Frehley y Criss- salieron y han salido del grupo varias veces por problemas de alcohol y drogas y eso no comulga con la filosofía de Paul Stanley y Gene Simmons. Parece que ambos han hecho sus carreras solistas y ahora están en pláticas para por lo menos reiniciar la amistad con sus antiguos jefes y amigos.
Les diré que Gene es un actor consumado, adicto al marketing y un padre e hijo preocupado por su familia. Incluso buscó a su padre de quien se distanció -a raíz del divorcio de sus progenitores y su partida con su madre a EUA de pequeño de su natal Israel- y al localizarlo trabajando como carpintero, le compró una casa, le montó un taller y se hizo cargo de todos sus gastos a pesar de no volver a verlo cara a cara, porque “a los padres hay que honrarlos y procurarlos porque sin ellos no estariamos aquí”. ¡Ah! Y tampoco tiene lengua de vaca, solo es un poco más larga de lo normal, ni toma sangre como el vampiro que interpreta, ya que lo que escupe, como mencioné, es una mezcla de yogurt con tintura vegetal roja, que debe saber a rayos.
Paul es un ser altruista, además de un muy buen cantante de musicales -interpretó “El fantasma de la Opera” en Broadway con gran éxito, pues él solo iba por unas cuantas semanas y se quedó por seis meses, alternando en ocasiones con otros cantantes-, además apoya una institución de terapia para niños que nacieron con problemas de deformaciones faciales, pues él mismo tiene una en una oreja.
Así que tampoco son satánicos, son personas tan normales como usted o yo pero, con una gran Karisma que nos hacen disfrutar Rock and Roll all night and party every day. Ese es KISS. El mejor espectáculo del mundo acompañado por temas clásicos que han acompañado a la juventud de tres generaciones.
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