Abril  18   de 2007

PRESENTA ESTA SEMANA:

 TRADICIONES DE BODA

 

 

¿Hasta donde fue el abuso?

ATENCO

 

Se vale soñarPONIATOVSKA

 

 

 

 

 

La verdad y la demagogiaFOBAPROA

 

 

 

 

 

FOBAPROA

 

UNIDOS

 

Se vale soñar

EXPO SEX  2006

 

 

 

 

 

Lo que viene

ESTO ES VERDAD

 

 

 

 

 

Lo que viene

 

PANICO SIN BLACKBERRY

 

 

 

 

 

El PRD vuelve a la izquierda

 

¡Vaya que tuvo que pasar tiempo!  No se puede dar por hecho, pero todo parece indicar que el PRD regresa a la izquierda y que retoma la dirección de la que no debió haberse alejado.

 

Encabezando propuestas modernas y necesarias como son la legalización del aborto y la eutanasia, así como la de considerar la posibilidad de legalizar las drogas para frenar la violencia que los grupos de narcos han desatado en todo el país -y que aquí se sugirió hace apenas unas semana-, los del sol azteca por fin toman iniciativa y posición ante temas espinosos, lo que marca un alejamiento lento pero seguro de su ex candidato presidencial, López Obrador, quien nunca quiso siquiera opinar sobre algún asunto que fuese ligeramente controversial, lo que constantemente los llevo a contradicciones y dudas ante el electorado.

 

No es un asunto menor. México necesita una izquierda fuerte, pero ante todo coherente y no titubeante.  Puede ser que el partido amarillo de verdad este conciente de sus errores y tenga ya un plan de resurgimiento a lo que antes fue, y de ser así, en esta revista lo celebraremos enormemente.  Esperemos.

 

 

 
PORTADA

 

 

 

 

 

Metepec: Paraíso de influyentes con la ley como decorado.

 

Oscar González es una persona que en poco tiempo ha demostrado que no debería haber llegado a la Presidencia Municipal de Metepec.  No solo por exabruptos como el de nombrar persona no grata a Felipe Calderón, quien según él ni siquiera debe poner un pie en el municipio, o el de nombrar ante un grupo de cubanos a Metepec como municipio socialista admirador de Fidel Castro, sino también como por su probada incapacidad, que volvió a brillar el pasado viernes.

 

El señor González encabezó un operativo en compañía de un grupo de policías para “cerciorarnos de que los bares respetan los horarios estipulados en el Bando Municipal”.  El alcalde pudo comprobar que no se respetaba el horario de servicio ni el de cierre, ambos sobrepasados por la mayor parte de los negocios, sin embargo no hubo detenidos, lo cual pasa a segundo termino al escuchar las razones que este hombre dio para justificar esta situación.  Cheque estas joyas, querido lector y dígame qué entiende.

 

“…no es interés de la policía arrestar a nadie que maneje, por ejemplo en estado de ebriedad, ya que el municipio es influyentista (sic) y todos dicen ser hijos o primos o sobrinos de algún funcionario importante; lo peor es que tienen razón...en esos casos, sólo pedimos les pedimos que alguien más, que esté menos tomado, maneje en su lugar y los dejamos ir”.

 

La ley dice que debe detenerse a cualquier persona que maneje en estado de ebriedad, pero si esa persona es -o dice ser- influyente, o sea, pariente de alguien con poder o amistades en el gobierno o la autoridad, la ley no se les aplica específicamente a ellos.  Además, ¡no es interés de la policía cumplir la ley!  Eso entiendo.

 

“…si una patrulla detiene a un influyente, el trato que recibirían los oficiales sería déspota y grosero, lo que provocaría un enfrentamiento y  muchos detenidos, lo que representaría más gastos para el ayuntamiento y una puerta abierta a la corrupción.”

 

Un influyente le daría a los patrullero que intenten detenerlo un trato déspota y grosero, así que nuestro alcalde, muy sensible por lo visto, no quiere que sus policías se sientan por alguna ofensa.  ¡Que considerado!  Es mejor no detener a un influyente que tener que pagarle un psicólogo a un policía.  ¿No se supone que los policías no deben ser tan delicados?  Ahora, lo del ahorro y la puerta a la corrupción no me queda claro.  ¿Es una aceptación tácita de que en el ayuntamiento o a sus autoridades se les ha detectado prácticas de corrupción?  Porque si no, ¿como puede estar diciendo esto?  Eso entiendo.

 

“…el interés de la administración es tener un municipio tranquilo y con población que sepa respetar no sólo las normas, sino a los vecinos.”

 

A ver.  Quiere un municipio tranquilo, pero no hace respetar los horarios de funcionamiento de bares y quiere una población que respete las normas, leyes debo entender, pero el no las hace cumplir a quienes no las respetan, y menos si se dicen influyentes.  Eso entiendo.

 

Oscar González quiere ahorrar, pero realizó un operativo que generó gastos, con más de 50 policías y 10 camionetas cuando no tenía intención de detener a nadie.  La ley se supone que es para aplicarse indistintamente a cualquier persona que no cumpla las reglas, pero González acepta que no lo hace con quienes se dicen –ni siquiera checa si lo son- influyentes-.  O sea que en conclusión, entiendo que este municipio está encabezado por un alcalde blandengue, temeroso, irrespetuoso de la ley, agachón ante los poderosos influyentes y pequeño ante su responsabilidad.  No sabe que nadie debe estar por encima de la ley.

 

Aunque quizás otra razón para no haber cumplido con el operativo pueda ser que se debe predicar con el ejemplo, lo cual en su caso es muy difícil, ya que las malas lenguas dicen que cada semana se reúne con sus amigos en un bar cercano a la alcaldía, en donde exige servicio hasta la madrugada, más allá de los horarios permitidos.  Así que si la autoridad no respeta la ley, ¿con que cara puede exigir a otros que lo hagan?  Y menos aun si, como él, son influyentes.  Eso entiendo.  ¿Usted no?

 

Comunicación: fj@lavisiondelciudadano.com

 

 
PORTADA

 

 

 

 

 

El vía crucis de hacer las cosas bien

 

Llegue con mi hijo a las oficinas provisionales que tránsito puso aquí en Toluca, pues las originales están (o estaban) siendo remodeladas.  Este lugar es exactamente como cualquier otro donde se atienden asuntos relacionados al gobierno, la palabra sería “burocráticas”; cajas arrumbadas, escritorios maltratados, alguna maquina de escribir del año de don Porfirio, en fin.  Ahora casi todos tienen computadora pero ya están bastante maltratadas y obsoletas, con sus clásicas calcomanías o muñequitos y flores de los más diversos materiales, con  las fotos de los hijos, los novios, los amantes y hasta las mascotas, figuritas y lo que a usted se le ocurra sobre las pc’s.  Los personajes que ahí laboran son de lo más extraño y curioso, pero seguro usted ya sabe, entre vestimentas demasiado coloridas hasta señoras ya bastante maduras con sus minifaldas, tops o blusas pegaditas y escotadas,  tacones altísimos y tintes de los colores más raros que se hayan visto, no falta la secretaria del mero mero que esa si esta bien vestida y a la moda, ya sabe la falda embarradita, arriba de la rodilla,  las zapatillas con tiritas muy finas, aunque los pies sean grandes y toscos, el cabello largo y en capas, y el maquillaje ¡oh My God!, capas y capas de pintura.  Aunque de primera impresión no se ve mal, si observa cuidadosamente la situación no resulta tan agradable, ¡claro que hay sus honrosas excepciones!, señoras muy conservadoras y hombres de traje o usando ropa sport pero bien vestidos, pero de estos casos hay muy pocos.

 

En fin, llevamos la solicitud de este trámite por ahí de finales de enero, era un cambio de placas, ¡rápido! nos dijo el que nos atendió pues aunque el auto venía de otro estado, en menos de un mes usted tendrá sus placas. . Se llenaron los papeles pertinentes, se hizo el pago y nos dijeron que volviéramos en treinta días a recoger las placas.

 

Al término del plazo fuimos muy puntuales a la cita a las mismas oficinas, pues las otras seguían en remodelación –por ahí nos dijeron que ya casi llevaban un año-  ¡mala señal! pensé yo, pero no quise ser ave de mal agüero,¡nunca me falla! las placas todavía no estaban porque faltaba que la carta de no sé qué cosa que debía firmar no sé quién todavía no estaba firmada, así que hubo que pagar una ampliación más y regresar en “otros treinta días”, ¿tanto tiempo para una firma?  Bueno pues ni modo, así se hizo y volvimos a esperar, pero ya se acercaba la fecha de la verificación. Se pago dos veces la ampliación.

 

El personaje que nos atendía todo el tiempo era una extraña combinación de Samy y Changoleón pero medio peinado y medio bañado, y no nos explicaba con exactitud, porque no sabía nada, pero muy amablemente nos dio el teléfono para que estuviéramos llamando cada semana porque igual y salían antes. Así que en cada llamada que hacíamos nos decía exactamente lo que él sabía “nada” pero que ¡por favor! que le llamáramos la siguiente vez.  Se llego la fecha nuevamente y ahí fuimos a ver que pasaba, faltaban dos días para que se venciera el plazo de hacer la verificación, así que estaban o estaban.  ¡Pues no estuvieron! Y ahora si mi hijo montó en cólera e hizo que este “amable” señor investigara que era lo que estaba pasando, y para variar “no sabía nada” la carta de no sé qué otra vez, la firma de no sé quién para variar, etc., incluso mi hijo les hizo la aclaración de que si no le daban las placas iba a existir una multa y que ¿quién iba a pagar eso? No pues no sé “nada”, contesto el amable y extraño señor.

 

Ya nos retirábamos del lugar cuando le dije a mi hijo que hablara con la secretaria que se veía ahí como la más importante, ya sabe la del “mero-mero”, pues ahí se plantificó mi hijo, le contó toda la historia y le dijo que si no le entregaban esas placas, esa oficina pagaría las multas subsecuentes que se dieran.  No quiero hacerle el cuento largo pero la señorita le dijo que por favor le permitiera un momento, llamo a otra persona y le pidió que investigara que estaba pasando. Cuando regreso, llamaron a mi hijo y le pidieron que regresara mas tarde, en unas tres horas pues la persona de la “firma”, no estaba y que para esa hora ya le darían  la famosa carta. 

 

Cuando regresamos nos entregaron el documento y al otro día había que ir a recoger las dichosas placas, lo cual se hizo mediante el pago pertinente,  que para variar, nunca le dicen a uno a cuanto asciende y se lleva uno unas sorpresas bastante desagradables, pues haciendo cuentas usted lleva una lanita considerando que eso cuestan, pero ¡no! Entre esto y aquello el pago resulto más grande de lo que esperábamos. ¡Pero ni modo! Había que hacerlo.  

 

Estoy segura que esta situación o similar se sigue cumpliendo al pie de la letra en muchas oficinas gubernamentales, un trámite que podría o debería ocupar no más de un mes tardó cuatro meses en solucionarse y no se ve que esto cambie o mejore por lo menos a corto plazo, ¿a mediano? Tal vez, pero ¿que se tendrá que hacer para solucionar esto? ¿Voluntad? ¿Capacitación? ¿Amor al trabajo? ¿Visión? ¿Misión?, todo esto debería bastar, pero no es así, Por lo tanto deberemos armarnos de paciencia y esperar que el cambio se haga de verdad. ¿O usted que opina mi querido lector?

 

comunicación: susy@lavisiondelciudadano.com

 

 
PORTADA

 

 

 

 

Napo y reforma laboral 

El Estado mexicano surgido de la Revolución de 1910 se arrogó el derecho de registrar ante la Secretaría de Gobernación partidos y sindicatos. Lo que fue un simple listado de los partidos existentes o un “sí, ya tomé nota de quién es tu nuevo líder” se convirtió en grillete y contubernio entre los gobiernos priistas y las corporaciones que le daban sustento, legitimidad y fuerza a cada nuevo sexenio.

Pero una cosa es “ya anoté tu nombre en mi agenda”, sin más finalidad que la de saber a quién dirigirse, a qué teléfono llamar, por quién preguntar, y otra ferozmente autoritaria la de dispensar, de manera discrecional, certificados de existencia o condenas a la inexistencia, como ocurre ahora cuando la “toma de nota” dejó de ser anotar el nombre del dirigente sindical elegido (mal o bien) por los miembros del sindicato.

Para ser dirigente minero, dicen los estatutos del sindicato minero y la simple lógica, hay que ser minero. Para ser elegible por electricistas, telefonistas o cantineros a la secretaría general del sindicato respectivo, los diversos estatutos sindicales exigen un mínimo de años como trabajador de esa área. Napoleón Napito Gómez Urrutia jamás fue minero, no pasó años ni horas picando piedra. Quizá jamás haya entrado a una mina. Su padre le heredó el cargo y los multimillonarios beneficios. No es problema del gobierno, sino de los mineros que lo aceptan. Que con su pan se lo coman. Si no ha dado cuentas de 55 millones de dólares, propiedad de los mineros, y los órganos de justicia sindicales han sido corrompidos, queda la justicia común: ya se le persigue por ese presunto delito. Y aun si no fuera así, para abrir una investigación bastaría la demanda interpuesta por los afectados.

Pero los trabajadores que impugnan a sus dirigentes se arriesgan a la inmediata expulsión del sindicato. Y al desempleo por la infame “cláusula de exclusión”. Creada para defender al naciente sindicalismo y convertida en su guillotina, obliga a la empresa a despedir al trabajador expulsado por el sindicato: la pinza es perfecta y deja ver la urgencia con que debemos afrontar una profunda reforma laboral.

Los mexicanos quitamos a la Secretaría de Gobernación, esto es al gobierno, el derecho a legalizar o no los partidos políticos que nos quisiéramos dar. Pusimos las elecciones en los vecinos de las casillas y la admisión de nuevos partidos en el IFE.

Pero no hemos hecho otro tanto con los sindicatos, aún sometidos al viejo corporativismo priista... sin PRI: la Secretaría de Gobernación tiene aún el manejo discrecional de la “toma de nota”, que no es tal ni lo ha sido nunca, pues no toma nota, sino dictamina quién es el bueno, quién ya no. Están los sindicatos ante un muro, que es el privilegio del gobierno para dar el nihil obstat al dirigente sindical, con lo que la representación obrera queda en manos de la Presidencia de la República. El PRI ponía y quitaba secretarios generales según su disciplina ante las órdenes presidenciales. Así seguimos porque el PAN no ha derribado esa estructura corporativa que no sólo afecta al obrero, inhibe también la inversión porque deja en manos corruptas el derecho de huelga y la existencia misma de la empresa.

LUIS DE LA BARREDA. La defensa que el ex ombudsman del DF ha hecho de su padre, el capitán Luís de la Barreda, está contenida en un expediente que no conozco y no sabría interpretar porque no soy experto. La desaparecida Fiscalía Especial para (etcétera) que acusó al capitán Luís de la Barreda padre como corresponsable de la matanza ocurrida en Tlatelolco el 2 de octubre de 1968 ha fracasado una decena de veces en demostrar, ante diversos jueces, ese grave cargo, siempre demolido.

A mí me convence más un dato absolutamente subjetivo: Luís de la Barreda hijo asistía con el entusiasmo de sus 18 años a las manifestaciones de 1968. Su padre, al frente de la Federal de Seguridad, y si hubiera conocido los planes homicidas, tenía todos los medios para impedir, hasta por la fuerza, con los guaruras necesarios, que su hijo fuera a Tlatelolco ese 2 de octubre. No lo hizo. El hijo entró ignorante a la trampa y salió vivo, como salimos el 99 por ciento de los asistentes. El padre no sabía lo que iba a ocurrir esa tarde en que, según la estela levantada por ex dirigentes estudiantiles, cayeron muertas 38 personas desarmadas y sin culpa. Repito: mi convicción es subjetiva... pero absoluta.

 

Comunicación: lgonzalez@milenio.com

 

 
PORTADA

 

 

 

 

 

Juegos de poder

Leo Zuckermann

Primeras reacciones de la masacre en Virginia Tech

Cho Seung-Hui, de 23 años de edad, estudiaba inglés en el Tecnológico de Virginia. El lunes mató a 32 personas con dos pistolas semiautomáticas y luego se suicidó. ¿Qué puede uno escribir sobre esta locura?

Lo primero que afloran son los lugares comunes. Que es la facilidad de adquirir armas en Estados Unidos la que explica esta nueva carnicería, como ya lo había advertido Michael Moore en su documental sobre la matanza en Columbine. Que si son los videojuegos que promueven la violencia. Que es el ambiente de guerra que legitima el asesinato de enemigos. Que es la falta de valores de una sociedad individualista y materialista. Son las explicaciones de siempre que se han convertido en clichés.

En lugar de seguir alimentándolos, me pareció interesante ver las primeras reacciones a la masacre en The Collegiate Times, el periódico del Tecnológico de Virginia. En su sitio de internet lo primero que llamaba la atención era la lista de los difuntos confirmados. Aparecían 14 de los 32 en una actualización de las 4:07 a.m.: nueve estudiantes de licenciatura, uno de posgrado, un instructor y tres profesores. El sitio prometía actualizar los nombres conforme se conocieran. No quiero imaginarme la angustia de familiares y amigos revisando esta lista cada cinco minutos.

La editorial institucional de The Collegiate Times cuestionaba la actuación de las autoridades universitarias que no cerraron el campus después de los dos primeros asesinatos a las 7:15 a.m. en un dormitorio; dos horas después, otras treinta personas eran masacradas en el edificio de ingeniería. Pero en retrospectiva las cosas se ven diferentes y, por tanto, "nadie puede culpar a una persona o a un grupo de personas". Lo cierto es que 33 murieron sin razón alguna: "se despertaron ayer por la mañana, se levantaron, vistieron y caminaron a sus clases, como el resto de nosotros. Se sentaron en el salón, listos para aprender. Hicieron su trabajo como estudiantes y a cambio nadie los protegió. Pero cómo podía saber alguien lo que vendría. La gente siempre quiere culpar, pero en este caso la culpa no es de nadie más que de la persona que disparó quien se llevó la vida de muchos y que luego, con egoísmo, se quitó la suya".

El columnista Brett Morris, estudiante de Virginia Tech, se preguntaba por qué se han incrementado este tipo de episodios en los últimos años. Su respuesta: una cultura de la violencia: "Estados Unidos tiene una historia de violencia extrema basada en el genocidio y la esclavitud. Cualquier nación fundada bajo esta premisa está condenada a sufrir de ideas culturales como la de que la violencia, usada para lograr una causa, es justificada".

Por su parte, Tim Edson llamaba a concentrarse en las víctimas. Con un tono religioso, pedía rezar por ellos y sus familias. Exhortaba a no culpar a nadie más que al asesino. Y, con el típico optimismo estadunidense, terminaba afirmando que "este horrible episodio fortalecerá a la comunidad del Virginia Tech".

Finalmente, Devin Stone recordaba con nostalgia la vida bucólica del pueblecito universitario antes de la masacre: un ambiente amigable donde los estudiantes se divertían. El asesino, sin duda, no compartía los valores de esta apacible comunidad. Conminaba a sus compañeros a recuperar el entorno pacífico "comenzando por sonreírnos los unos a los otros". Había que regresar a la normalidad: "necesitamos vivir sin miedo".

Así de diferentes fueron las primeras reacciones del periódico universitario ante el infame acontecimiento.

 

 

PORTADA

 

 

 

 

UNIDOS

 

No sabes sí la vida

puede ser par los dos,

pues no sería ya más vida

si no estamos juntos los dos.

 

Quisiera estar a tu lado

y nunca separarnos

pero, nuestros destinos

nos han distanciado.

 

Vivimos juntos

muy gratos momentos,

que en nuestros recuerdos

siempre vivirán.

 

Yo sé,

que la vida sigue

pero, no lograre

ya vivirla

porque no estas junto a mí

pero, viviré

si tú no me olvidas.

 

Pero, aún así

yo seguiré,

¡Viviendo!

de los recuerdos;

que alguna vez,

nos llegaron a unir.

 

Comunicación: bacabs_dg@yahoo.com.mx

 

 

PORTADA

 

 

 

 

COLABORACIÓN

Preocupación por una noche sin BlackBerry en Norteamérica

NUEVA YORK (Reuters) - Los adictos confesos al BlackBerry experimentaron al mismo tiempo sentimientos de pánico y alivio, cuando la red del dispositivo de correo electrónico móvil se atascó durante la noche y cortó las comunicaciones a millones de suscriptores.

 

El corte de servicio, apodado el "CrackBerry" por los usuarios que trataban de conectarse, provocó que algunos negocios no se cerraran, que se olvidaran reuniones e incluso uno o dos trastabillones en las oficinas de gobierno en América del Norte.

 

El fabricante de BlackBerry, Research in Motion Ltd. , dijo el miércoles por la mañana que había restituido el servicio para la mayoría de los clientes, luego de una interrupción en América del Norte que comenzó la noche anterior.

 

La empresa no dio detalles sobre qué causó el problema. Pero los abogados, operadores, políticos y otros profesionales que dependen del dispositivo dejaron en claro que sus vidas recibieron un buen golpe.

 

En el Congreso estadounidense, donde los legisladores y el personal dependen del BlackBerry para el seguimiento de las batallas legislativas y políticas, el apagón temporal fue limitante.

 

"Siento como si me hubieran amputado mi brazo izquierdo," dijo Joe Shoemaker, director de comunicaciones del asistente del líder Demócrata del Senado Dick Durbin de Illinois.

 

El portavoz de la Casa Blanca, Tony Fratto, abrió una reunión con reporteros disculpándose por los correos electrónicos perdidos.

 

Charles Ross, un abogador defensor criminal de Nueva York, dijo que el corte lo dejó sintiéndose "vulnerable e incómodo," y que debido a él perdió un desayuno que tenía previsto con un colega.

 

"No apareció porque me envió un correo electrónico diciendo que no podía acudir," dijo Ross. "Eso me muestra cuan dependiente somos de esos dispositivos móviles," añadió.

 

Una analista de Wall Street dijo que siguió presionando el botón "actualizar" de su versión de BlackBerry, porque no creía que el sistema pudiera fallar.

 

"Tengo un cliente que me habría pagado un negocio inmediatamente, pero no pudo localizar a sus operadores porque el servicio de BlackBerry no funcionaba," dijo.

 

Investigadores británicos y americanos encontraron el año pasado que un tercio de los usuarios de BlackBerry mostraban signos de negación y evasión, similares a los de alcohólicos y drogadictos.

 

En el Parlamento canadiense, el ministro de Recursos Naturales, Gary Lunn, contó cómo casi se pierde el martes en la noche una votación relacionada con los trabajadores de ferrocarriles por que no recibió varios mensajes.

 

"Finalmente, recibí un llamado telefónico que decía, tiene seis minutos antes de la votación," dijo Lunn a periodistas.

 

No todos fueron perjudicados por el corte, particularmente los suscriptores a sistemas alternativos de correo electrónicos móviles, como el teléfono Treo de Palm Inc., o los dispositivos móviles que usan programas de Microsoft Corp. .

 

"Afortunadamente, estoy usando un Treo," dijo la presidenta financiera de Yahoo, Susan Decker, al canal de negocios CNBC.

 

(Reporte adicional de Thomas Ferraro en Washington, Randall Palmer y David Ljunggren en Ottawa, Martha Graybow, Joseph A. Giannone y Mark McSherry en Nueva York)

 

 

PORTADA